domingo, 5 de abril de 2020

EL MUNDO AL QUE NOS LLEVAN



Las cartas están sobre la mesa. El poder en la sombra hizo su magistral movimiento y ahora podemos ver hacia dónde nos encaminan,

La economía mundial ha sido destrozada, con la excusa de frenar el virus la era del capitalismo de consumo masivo ha terminado. Las grandes fortunas, dueñas de las corporaciones multinacionales, de los medios de comunicación y de los partidos políticos (que han conformado con su financiación durante décadas) han dado un giro al timón ante el agotamiento del planeta y su necesidad de seguir disfrutandop sus privilegios.

Los recursos del planeta son ya demasiado escasos para que la mayoría de la población pueda gastarlos como hasta ahora. Se cancela la 'clase media' con poder adquisitivo para viajar y gastar en lujos supérfluos. Se desmantelará el 'estado de bienestar': ya se puede manejar a las masas mediante el miedo y la coerción.

Para suavizar la transición los gobiernos mostrarán al principio cara amable. Se ofrecerán subvenciones, ayudas y alimentos para 'paliar la situación de necesidad'. Pero evidentemente con las arcas estatales vacías esas ayudas irán retirándose al tiempo que se endurece el discurso político,

Se ha sentado el precedente de un estado de excepción que suspende los derechos ciudadanos. Desde el momento que aceptamos que nos quiten el derecho a la libre circulación, todos los demás caen como un dominó. Gobiernos cada vez más autoritarios, aplaudidos por súbditos asustados, pueden actuar con total impunidad. Se pone como ejemplo de efectividad el 'modelo Chino'... que puede ser la peor de las pesadillas para un país empobrecido,

La reducción progresiva de la población mundial es parte del plan. La robotización y automatización de tareas hace que ya no necesiten de tanta mano de obra. A los más ricos les sobra gente y prefieren disfrutar de su planeta menos poblado.

La pobreza y el miedo son el caldo de cultivo perfecto para los nacionalismos y la xenofobia. Y gobiernos así son el preludio claro a guerras y genocidios. No hay que aguzar mucho la vista para empezar a verlo ya en varias partes del mundo.

El imperativo económico será la excusa para aumentar el extractivismo en las zonas del planeta con más recursos. Nada podrá paliar la destrucción de la naturaleza en países del cono sur, y la eliminación de los activistas será aún más descarada que hasta ahora pues es 'interés nacional' seguir adelante.

También el libre acceso a la información por internet irá liquidándose país por país, en aras de proteger a la ciudadanía de nocivas 'influencias externas'. ¿Te parece imposible que tu gobierno llegue a tal extremo? Recuerda que el modelo chino es lo admirable.

No se trata ya de distinción entre países 'socialistas' y 'capitalistas'. Despierta. Las élites de cada nación se preocupan sólo de sí mismas (y los gobiernos son títeres del poder económico).

Acostúmbrate a la militarización de las calles. Es por tu seguridad... luego será por la seguridad de los que mandan. Pero ya no va aflojarse a largo plazo, pues personas desesperadas por la pobreza tratarán de rebelarse y no creas que van a tener mano suave para controlarlos.

El excedente en la producción de alimentos no durará mucho. Con el parón de meses se han dañado cultivos, la cadena global de suministros está tensionada y la inversión va a caer en picado. Ya organismos internacionales avisan de que puede dispararse el déficit alimentario mundial. Quizá pienses que tu suministro está garantizado en el supermercado de tu barrio, pero... ¿y cuando el hambre lleve a saqueos y no pueda controlar la seguridad?

Tampoco los sueldos y pensiones públicos están asegurados. Medidas de 'control de gasto' estatal van a recortarlo todo. Y en última instancia la crisis económica puede llevar a un aumento sostenido en el precio de los bienes de primera necesidad que diluyan el valor de tus ingresos.

Perspectiva muy negra la que pinto, cierto. Ojalá me equivoque, pero creo que es la conclusión más lógica viendo el curso de los acontecimientos. Hay algo que la historia nos deja muy claro: todo pueblo que permite a sus gobernantes robarle libertades sin protestar, acaba esclavizado. Sólo siendo conscientes de lo que se nos avecina tendremos oportunidad de darle la vuelta a este nefasto futuro.

Despierta y Lucha

#YoQuieroSalir




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